Las emociones básicas surgen en el curso natural del desarrollo de cualquier individuo, sin importar el entorno en el que se desenvuelva, y tienen como objetivo auxiliarnos en la supervivencia, orientar nuestra conducta y promover las relaciones entre las personas. En primer lugar, existe la perspectiva convencional acerca de la presencia de seis emociones fundamentales, las cuales abarcan el miedo, la ira, la sorpresa, la felicidad, la tristeza y el asco, según lo señalado por (Matsumoto y Ekman, 2009 & Damasio, 2000).
Sabemos que las emociones son sensaciones y reacciones que todos experimentamos al interactuar con nuestro entorno y con los demás. Se manifiestan como una reacción veloz ante modificaciones en nuestro entorno, ante la presencia de objetos, personas, lugares, situaciones o recuerdos significativos.
Cambios que producen las emociones a nivel corporal
Físicos
- Respiración
- Pulso
- Temperatura corporal
Psicológicos
- Estados de ánimo
- Sentimientos
- Interpretación de la situación
Conductuales
- Expresión emocional
- Acciones y comportamientos
Las emociones tienen tres principales funciones:
- Función adaptativa: facilitan la identificación de los acontecimientos para que podamos ajustarnos a las circunstancias y responder adecuadamente a lo que nos encontramos
- Función social: al manifestarlas, nos asisten en la comunicación y en la construcción de relaciones con los demás. Favorecen la interacción entre las personas
- Función motivacional: brindan energía a nuestras acciones, posibilitando que se lleven a cabo con mayor intensidad. La emoción aporta fuerza a nuestra conducta, y a su vez, nuestra conducta le proporciona dirección a la emoción
Características
- Se reconocen a través de una expresión específica, ya sea facial o corporal
- Generan una disposición característica para la acción, cumpliendo una función adaptativa
- Han desempeñado un papel fundamental en la adaptación del organismo a su entorno, incluyendo aspectos como la supervivencia y la procreación
- Poseen una naturaleza universal, manifestándose en todas las culturas humanas
- Surgen desde el nacimiento y perduran a lo largo del tiempo
- Son contagiosas, de modo que la observación de alguien experimentando una emoción puede transmitirnos su estado afectivo
- Inducen respuestas biológicas involuntarias en el organismo
En 1980, Plutchik ideó la Rueda de las Emociones, la cual comprendía ocho emociones fundamentales y ocho emociones secundarias, cada una formada por la combinación de dos emociones básicas. Este gráfico, basado en la teoría psicoevolutiva de las emociones, configura un diseño similar a una flor con ocho pétalos de colores distintos. La teoría propone que el mapa emocional de los seres humanos y los animales ha evolucionado para ajustarse al entorno externo. Por ende, según el autor, las emociones no son inherentemente ni positivas ni negativas. Más bien, representan un elemento esencial, ya que desempeñan funciones específicas que fomentan la supervivencia y la adaptación (Alabau, 2021).
Emociones básicas y secundarias
Las emociones primarias desempeñan una función adaptativa claramente identificable al inclinarnos hacia comportamientos específicos, lo que implica una motivación inherente en cada emoción:
- El miedo nos predispone a la huida, evitación, afrontamiento o protección ante situaciones peligrosas
- La tristeza favorece la reintegración personal, la reflexión interna y la reconciliación
- La ira proporciona recursos para la autodefensa o el ataque
- La alegría impulsa a la acción, la afiliación y el pensamiento flexible y divergente
- La sorpresa nos lleva a detenernos y enfocarnos en lo imprevisto
- El asco o aversión nos orienta hacia el rechazo o la evitación de situaciones perjudiciales
- La culpa tiende a la reparación
- La admiración nos impulsa a imitar
- La curiosidad nos lleva a la exploración
- La seguridad se relaciona con el control
Por otra parte, podemos encontrar en las emociones secundarias algunas funciones adaptativas como:
- La anticipación del miedo, es decir, la ansiedad, motiva a tomar medidas de precaución frente al peligro
- La hostilidad, por su parte, tiene como función inhibir comportamientos indeseables de otras personas y evitar situaciones conflictivas, inclinándose hacia la agresividad cuando es necesario
- En cuanto al humor y su expresión a través de la risa, fomentan una actitud de conexión con los demás y contribuyen a la difusión de un ambiente positivo en el grupo
- Por último, el sentimiento de amor lleva a cuidar y proteger a la persona amada
Clasificación de las emociones
Emociones sociales
Características exclusivas de los humanos, como principios y normas grupales, no presentes en animales. Las emociones sociales, como orgullo y arrepentimiento, son complejas, aprendidas y varían según las costumbres culturales, afectando el lenguaje emocional. La carga social de cada cultura influye en el significado y expresión de estas emociones.
Emociones morales
Las normas morales, basadas en principios universales, buscan el bienestar humano y el respeto a los derechos fundamentales. Emociones como culpa, vergüenza e indignación surgen ante la percepción de cumplimiento o violación de estos principios, diferenciándose de las normas sociales específicas de grupos particulares.
Emociones estéticas
Las emociones estéticas, respuestas a la belleza, tienen aplicaciones educativas en historia del arte, expresión artística y más. Apreciarlas contribuye al bienestar. El arte busca activar emociones como arrobo, embeleso, admiración y enamoramiento en diversas expresiones artísticas.
Bibliografía recomendada
Antoni, M. & Zenter, J., (2014). Las cuatro emociones básicas. Herder.